Síndrome de Déficit de Testosterona y Deseo Sexual Hipoactivo
Síndrome de déficit de testosterona
El síndrome de déficit de testosterona (SDT) es un síndrome clínico y bioquímico asociado a la edad que se caracteriza por unos síntomas sugestivos de déficit de testosterona y una disminución de los niveles de testosterona sérica.
En la mayoría de ocasiones el motivo de consulta al urólogo/andrólogo es la disfunción eréctil o la disminución de la libido. Pero más allá de esos síntomas, el déficit de testosterona asocia una serie de condiciones que afectan negativamente a la salud del hombre.
Tanto los niveles plasmáticos de testosterona como los de sus proteínas trasportadoras presentan importantes cambios asociados al envejecimiento. Así, mientras los niveles de testosterona total y albúmina tienen tendencia a decrecer, los niveles de SHBG (proteína transportadora de hormonas sexuales) aumentan; por tanto habrá más testosterona plasmática que se unirá a la SHBG, con el consiguiente descenso de las fracciones de testosterona libre y biodisponible. Por todo ello los niveles de testosterona libre y biodisponible descenderán con la edad en mayor medida que los de testosterona total. Se ha observado en estudios poblacionales que a los 80 años de edad, los varones presentan únicamente el 50% de los niveles de testosterona observados en varones sanos de 20 años de edad.
La disminución de los niveles séricos de testosterona producirá entre otros efectos una disminución de la función sexual y del estado de ánimo, así como disminución de la densidad mineral ósea y cambios en la composición corporal.
El objetivo principal del tratamiento sustitutivo con testosterona es restablecer las concentraciones fisiológicas normales de testosterona. El método de tratamiento sustitutivo con testosterona depende de la disponibilidad, seguridad, tolerabilidad, eficacia y preferencia del paciente y del médico. En la actualidad se disponen de presentaciones inyectables y geles transdérmicos.
Deseo sexual hipoactivo
l deseo sexual hipoactivo (TDSH) o bajo deseo sexual es la ausencia persistente de pensamientos, fantasías eróticas y falta de motivación para tener actividad sexual.
A menudo la persona con TDSH evita cualquier tipo de contacto sexual.La persona no comienza (deseo espontáneo) ni responde a la pareja (deseo receptivo).
La falta de deseo conlleva alteraciones en las relaciones de pareja, aunque algunas veces es la causa y en otros la consecuencia.
Esta falta de interés puede darse tanto en cualquier área de la sexualidad en general (TDSH generalizado) o hacia la pareja de forma específica (TDSH situacional).
La disminución del deseo puede ser secundaria a una disfunción eréctil u otros trastornos sexuales.
Podemos hablar de causas multifactoriales (factores orgánicos, psicológicos y / o del entorno).
Tratamiento psicológico
El objetivo es recuperar la motivación para tener interacciones sexuales y las fantasías eróticas.
Psicoeducación y pensamientos realistas: «el hombre no siempre tiene ganas».
Descubrir y favorecer los inductores de deseo.
Realizar técnicas de reconexión físico-emocional con la pareja (focalización sensorial).
Incorporar ideas para potenciar el deseo como juegos sexuales y / o juguetes eróticos para diversificar, innovar y enriquecer el erotismo.
Probar otras actividades eróticas sin penetración; así se acostumbra y se entrena a la pareja a diversificar las prácticas sexuales.
Se aconseja que se establezca un ritmo sexual más o menos estable para crear un hábito, programando los encuentros de intimidad.